Según la entidad abiertamente "En Cataluña, más de una persona se quita la vida cada día. El suicidio se ha convertido en la primera causa de muerte externa, por delante de los accidentes de tráfico, y así, en un grave problema de salud pública y social. " La asociación APSA (Asociación para la Prevención del Suicidio y Atención al Superviviente) indica en su recopilación de datos que "En los últimos 45 años, la tasa de suicidios ha aumentado un 60% a escala mundial". Realmente es un problema de salud pública.
Pese a estos datos se habla muy poco del suicidio. Poca prevención, poca detección precoz y poca información y acompañamiento cuando pasa. La propia palabra está muy estigmatizada y es demasiado a menudo invisible.
Con los años vamos avanzando hacia una mejora, con más información y menos tabúes, aunque todavía queda mucho camino por recorrer hasta llegar a un punto en el que, sobre todo, se pueda prevenir y actuar en caso de tentativas o ante situaciones de riesgo.
Hoy sin embargo, me gustaría hablar de lo que pasa "después de la llamada", como he querido titular. ¿Qué pasa con las personas supervivientes, el entorno próximo. La prevención es muy importante y una pieza clave, pero entretanto trabajamos para prevenir, no debemos olvidar el acompañamiento al duelo de las personas supervivientes y también velar por que el suicidio no sea invisible.
Nadie está preparado para recibir la noticia de que un ser querido se ha quitado la vida ... Todas las personas que hemos podido vivir como alguien importante para nosotros se suicidio nunca olvidaremos "la llamada". Una llamada que quizá te veías venir, tal vez te sorprende, pero que es como si te partieran en dos con una espada afilada. El duelo de alguien cercano es duro, independientemente de la causa de la muerte. Pero cuando la causa de la muerte es un suicidio, es más duro aún que superar para las personas cercanas.
¿Por qué? Pueden ser varios motivos:
- El propio tabú de la palabra suicidio o tentativa de suicidio afecta a la gestión emocional del entorno de la persona que se ha suicidado o lo ha intentado porque es precisamente este tabú lo que no nos permite hablar de forma abierta y clara sobre la situación de riesgo, tentativa o el suicidio propiamente.
- También nos encontramos con que familiares y amistades no saben con quién hablar y esto termina afectando a la hora de encontrar apoyos, soluciones y poder superar la situación.
- Otro momento complicado es en el momento del duelo ya que de nuevo el tabú hace que se tape y no se asuma la causa de la muerte.
- El sentimiento de culpa: podría haber hecho algo? Porque no lo vi? Le dije como la quería antes de perderlo? ¿Por qué ha pasado?
- La población adulta y sobre todo gente mayor actual hemos crecido sin información sobre suicidio, todo lo relacionado con suicidio o intento de suicidio se tapaba disimulaba ... a mí en la escuela nunca me hablaron, ni en el instituto y digamos que tampoco es conversación frecuente si estás tomando algo con amistades o para hablar en el trabajo.
Vea el increíblemente fuerte puede ser una palabra, un concepto. Si hacemos visible la palabra podemos avanzar hacia una mejora? Yo creo que sí. No es la única solución o respuesta, desgraciadamente no tenemos una fórmula mágica, no tenemos la solución exacta y adecuada ante alguien que acaba de perder un hijo o hija, hermano o hermana, pareja, amigo o amiga ... no la tenemos. Pero sinceramente creo que hablar de ello es un paso muy importante y por supuesto hacer un buen acompañamiento a las personas supervivientes.
Hablemos! Hablar cuidado, ayuda a seguir adelante. Con respecto, desde la comprensión, sin juicios. Ocultar las cosas no ayuda a avanzar.
Yo no soy psicóloga, ni terapeuta, ni una gurú del tema pero poco después del suicidio de mi hermano me dije a mí misma que si compartir mi experiencia podía ayudar a abrir camino y romper con tabúes y estigmas, lo haría. Porque es así como nuestra sociedad avanza y se generan cambios poderosos; también porque a mí me hubiera gustado mucho tener alguien con quien hablar, compartir todo lo que me estaba pasando más allá de mi entorno cercano y, porque no, por egoísmo: esto me ayudó y me sigue ayudando a seguir.
Laura Dueñas
